Desde que mi hijo empezó a sufrir los cólicos del lactante, me propuse lo que cualquier madre o padre en mi situación, tratar de poner remedio al sufrimiento de mi bebé, e intentar que fuera un niño tranquilo y feliz. Esta es nuestra historia…
Espero que esta noche sea tan mágica para todos nosotros como cuando teníamos 4 o 5 años y éramos incapaces de dormir por si oíamos llegar a los Reyes Magos y que nunca perdamos la ilusión por estos pequeños momentos.